Hacer masa pegajosa y amasarla y escurrirla entre los dedos no toma tiempo y cuesta centavos. Después de que los niños han disfrutado con la masa, pueden hacer con ella figuras que tomarán forma y dureza si se dejan de un día para el otro, y así se hacen a un recuerdo perdurable de su sucia obra maestra. (Es probable que la preparación de la masa requiera de la ayuda de un adulto, aunque en todo caso esta masa es inofensiva para los niños; es más, si por accidente llegaran a tragar un poco, no les hará ningún daño).
Lo que se necesita:
2 tazas de harina de trigo
1 taza de sal
2 tazas de agua
2 cucharadas de aceite de cocina
4 cucharaditas de crema tártara
Unas cuantas gotas de colorante de alimentos de diferentes tonalidades
Cómo se hace:
Vierta los ingredientes secos en una sartén y agregue los líquidos gradualmente
Revuelva a fuego muy lento hasta que la masa forme una bola y esté menos pegajosa
Vierta la preparación en una superficie limpia y amásela hasta que se vuelva suave y húmeda
Divida la masa en cuatro partes y agréguele un par de gotas de colorante (la masa debe quedar de cuatro colores)
Guarde la masa en un recipiente hermético por más de dos semanas, o moldéela de distintas formas y deje las figuras a la intemperie, en la noche, para que se endurezcan